EL TAXISTA VIOLADOR

EL TAXISTA NOCTURNO

Lo que voy a contar me ocurrió hace tiempo con un taxista. Yo vivía en un barrio alas afueras de la ciudad de Villavicencio en mis 16 años, ahora tengo 25 años, me considero bonita y tengo buen cuerpo, nada exuberante realmente, pero piernona y con cintura marcada.

A mis 16 añitos ya me sentía muy independiente ese día había tenido una actividad extra del colegio y había terminado como a las 10:30 de la noche. No estaba muy segura de cómo volver desde ahí en transporte publico, además de que ya era bastante tarde y no quería llegar tarde a mí casa. Decidí tomar un taxi, ya que casi no había trafico. Abordé el taxi en una esquina de la calle; siempre que tomo un taxi me fijo en el conductor antes de subirme pero con las prisas no le di importancia. Me subí en el asiento junto al conductor y le dije un "buenas tardes", el me devolvió el saludo y lo miré. Era un hombre de unos 30 años acuerpado 175 cm de estatura ojos negros y cejas pobladas y con barba de algunos días. - A dónde te llevo?- Me preguntó. Le indique mi dirección y siguió avanzado. En algunos momentos yo notaba como me miraba, me asustaba un poco pero igual no dije nada, solo quería llegar a mi casa. Durante el camino fui fijándome cómo nos íbamos pero la verdad no me servía de mucho porque no ubicaba esas calles. El taxista no tardó en hacerme platica. -Parece que más adelante ya empieza el trafico- Me miró y me sonrió. -Sí parece que sí...- Yo le devolví la sonrisa por mera amabilidad -Mejor daré vuelta aquí para que no llegué tarde a su casa. Él dio la vuelta en la siguiente calle y me asusté un poco pero no le dije nada porque igual no sabía dónde estaba. -¿Viene de la escuela, nene?- me preguntó -No, es que hicimos un trabajo extra y acaba de terminar. -Ya es algo tarde para que ande un nene en la calle? Para entonces habíamos alcanzado una calle oscura y luego de decirme eso puso su mano en mi rodilla. Yo fingí que no había pasado nada y solo lo miré y le dije "Jajaja, sí creo que un poco", y miré al lado contrario. El no quitó su mano y yo seguía sin decirle nada al respecto. No tardó mucho en empezar a moverla de arriba hacía abajo alrededor de mi rodilla. Pasaron como 5 minutos cuando miré el taximetro; ya casi había llegado al limite de dinero que llevaba conmigo y pensé en que haría. Podía bajarme ahí mismo pero igual no podría seguir caminando, o podría seguir y pedirle que me esperara para entrar a mi casa por más dinero una vez que llegáramos. Opté por decirle que me bajaba y ya me las arreglaría yo, de paso podría bajarme y él ya no seguiría acariciandome la pierna. -Oiga creo que ya me bajaré aquí, la verdad es que ya no traigo más dinero y si no no le voy a poder pagar. -No te preocupes mi reina, ya nos arreglamos cuando te deje en tu casa porque me dices asi -pues porque vas hacer mi nena esta noche asi me vas a pagar la carrera o quieres que te dje por estos lados que s peligroso

- Tienes unas piernas preciosas, mi amor Yo solo sonreí excitada que un macho me dijera es pero asustada Luego de esto, comenzó a subir su mano por mi pierna hasta llegar a mi culito Al ver que no hice nada nuevamente,tomó confianza y sentía cómo me acariciaba. Inconscientemente yo separé más las piernas y el no se hizo esperar: con su mano hizo a un lado mi tanguita y comenzó a introducir un dedo en mi anito. -Mmmm estas muy dilatada, princesa dejó de tocarme y en su lugar se desabrochó el pantalón y sacó su miembro. Era de buen tamaño pero sobre todo muy grueso. De 20 cm -Me vas a ir pagando el dinero, mi amor, quiero que me la chupes mientras llegamos a mi casa nenita. Baje la cabeza y mientras el seguía manejando yo metía y sacaba su verga de mi boca, o al menos lo que podía. No paso mucho tiempo cuando noté que ya no avanzábamos. Al parecer se había estacionado en algún lugar apartado porque yo no escuchaba ruido en la calle. Me asusté un poco nuevamente, no sabía qué hora era ni dónde estábamos, por lo que se la chupaba más rápido para que terminara y pudiera irme. Él me tomaba del cabello y me movía la cabeza muy brusco. -Ahhh así, sigue así puta. Como te gusta mamar verga... vas a hacer que me corra puta... ahhhh mmmm, tragatelo... me corro ahhh... Sentí como sus chorros de semen me llenaron la boca y no tuve de otra más que tomarmelo todo. Una vez que paso me incorporé y me acomodé el cabello. Creí que arrancaría el taxi pero lo que vi fue que se bajo y se dispuso a abrir la puerta del copiloto. -Bajate, zorrita llegamos a mi casa. No dije nada y me bajé, estaba preocupada, pero excitada -Vamonos por favor, debo llegar a mi casa. -No mi amor, me vas a pagar ahorita lo que me debes y lo que falta, esto solo fue una parte. -No por favor, vuelvo a chuparsela pero solo eso. -No te estoy preguntando, puta Me tomó del brazo y me llevo a su cuarto me dijo ponte esto y esto eran prendas intimas femeninas pelucas y vestidos tacones en esa casa había de todo tien 10 min para que se vista y se ponga bien bella para mi….rapidamente me vesti y al Sali donde el estaba me dijo quedaste preciosa juliana asi te llamaras y me empujó sobre su cama y quedé boca arriba. Su verga ya estaba completamente dura de nuevo y sabía que lo peor estaba por pasar. -Basta por favor, no!.- Yo estaba forcejeando pero él me tenía bien agarrada de ambos brazos contra la cama. -Mira como me tienes puta, de aquí no te vas hasta que no acabes lo que empezaste y me pagues el viaje. -Por favor, cualquier cosa menos eso -Te voy a coger bien rico y hasta me vas a pedir más, puta. Estaba a punto de gritar pero me dio una cachetada y luego me cubrió la boca con su enorme mano y donde grite le pego. -Mira zorra, que ni se te ocurra gritar si quieres llegar bien a tu casa ¿Me entendiste? Asentí, tenía miedo de lo que pudiera hacerme y no me quedaba más que resignarme. -Te voy a quitar de la mano y pobre de ti si gritas Asentí nuevamente. -Ahora sí mi amor, te voy penetrar bien rico ese culito y tienes que aguantar calladita nada de gritar. Me tomó de las caderas y se acercó más a mí . y me puso en pollo asado Tuve que contener un grito cuando de un golpe me metió todo su miembro. Sentía que me había perforado el culito un taladro No le costó mucho trabajo porque yo estaba algo dilatada. Comenzó con se mete saca frenético, me sentía como toda una perra en celo. Sus huevos chocaban contra mis nalgas y cada vez sentía que me embestía más duro. Me excitaba ser violada por una taxista y si cooperaba todo saldría bien Continuo cogiendome así, me había bajado lo suficiente el escote del vestido para sacar mis pechos, los chupaba y mordía. -Mmmm ahhh estas bien rica puta, mmmm tu culito vaginal me aprieta bien rico la verga. No tarde mucho en resignarme y empezar a sentir placer con la cogida que estaba metiendome ese taxista. -Ahora te voy a coger como la perra que eres julianita. Sacó su verga y me dio la vuelta, y me puso en 4. Apenas me tuvo así me perforó el culito tan brusco como la primera vez y no pude evitar soltar un gritito. -Mmmm -Te gusta cómo te cojo verdad puta? -Sí me gusta, macho eres todo un macho ahhh, mmmm... Ya no me importaba que lo notara, estaba completamente perdida y solo sentía su verga entrar y salir. -Pinche zorra, me vas a sacar toda la leche. Pideme que te coja más duro, puta. -Sí, mmmm cogeme más duro, por favor... dame tu lecvhe macho mmmmmmm Siguió cogiendome como a un animal otro rato que me pareció eterno.

-eso juliana sufre perra y me daba vergazos sin compasión…trágatela toda perra hp eso es lo que te mereces por ser puta harta verga…

-te gusta que te castigue zorra???

-siiii papi dame duro soy tu nena juliana…

-si mamitra asi me gustan sumisas toma tu regalo del dia de la puta -Ya voy a correrme, puta -No por favor, dentro no, termina afuera -No zorrita, te voy a llenar de leche es tu culito vaginal mamasita rica -Por favor donde sea menos adentro. -Te voy a preñar, perra... soy tu macho y una palmada toco mis nalgas -Aaaahhhh no, por favor, sacala le suplique -Aaaaggggh me corro...! Sentí toda su leche caliente llenarme, parecía que nunca iba a dejar de salir y cuando sacó su verga su semen empezó a escurrir por mis nalgas y me manchó un poco las tanguitas . Luego de eso me hizo limpiarle la verga. Nos subimos al taxi y por suerte cuando llegué no había nadie en mi casa.